En todo equipo fotográfico no puede faltar un buen trípode. Como cualquier aficionado, empecé con un trípode de 29,95 euros de Fotoprix de aluminio y plástico, de esos que tiemblan cada vez que estornudas o se apoya una mosca en el parasol del objetivo. Llega un momento que te das cuenta de que es absurdo apoyar un equipo de varios miles de euros en un trípode "de oferta" y decides invertir en una de las piezas importantes - más de lo que parece - del equipo de todo fotógrafo serio. Después de buscar y rebuscar entre las marcas más comunes como la popularísima Manfrotto encontré en JordiBas, una tienda de la calle Pelayo de Barcelona, una oferta interesante de una marca desconocida para mí. Se trataba del trípode Giotto's MT9260. Su estructura, robustez y estabilidad me sedujo desde el primer instante y tras lanzarme a por él, elegí como rótula a la MH5001 de la misma marca. En la actualidad fabrican modelos de aluminio, fibra de carbono y aleaciones ligeras. El que me compré yo es de metal y aluminio. Ligero, pero no deja de ser metal y cargar con él todo el día puede ser un engorro; especialmente si eres de los que te da pereza meterlo y sacarlo de su cómoda bolsa de transporte cada dos por tres. Hay otro modelo muy similar de fibra de carbono (MT8261):
El MT9260 pertenece a la serie profesional clásica (no es de los de 3 direcciones de giro de última generación) de Giotto's y concretamente a la categoría de trípodes con sistema de cierre por rosca conocido como SDL o Speedy Dust-Proof Locking, resistente al polvo y la arena y además absorbe las vibraciones. Este tipo de cierre tiene muchos detractores pero debo decir que a mi, personalmente, me parece genial y me va muy bien. Las secciones del trípode están unidas por unas roscas de caucho o goma altamente resistente al desgaste, que con 1/8 de vuelta se afloja y permite el desplazamiento de las secciones. Se puede operar perfectamente con una mano. El movimiento de las piezas es suave y confortable.
Este sistema de rosca tiene como todo, sus cosas buenas y malas. He podido comprobar que en ocasiones, la rosca se encalla y tienes que hacer un poco de fuerza para que ceda. También tienes que tener cuidado con no pasarte de rosca y es recomendable que después de su uso lo limpies a conciencia ya que siempre, quieras o no, se mete polvo o arena en las juntas y se mezcla con la grasa de silicona que lubrica las juntas. Dicho de otro modo, es un sistema cómodo y fácil de usar pero que conviene manejarlo con cuidado y limpiarlo periódicamente.
Este trípode está pensado para fotografía macro. Le puedes reemplazar la barra central por una de menor longitud (debes comprarla por separado) y con las herramientas que incluye de serie, que vienen en una práctica funda de tejido resistente, se desmonta rápida y fácilmente.
A continuación se puede ver cómo se realiza la manibra de extracción de la columna central del trípode para sustituirla por la MTC corta o bién, invertir la posición de la columna para colgar la cámara boca abajo y poder realizar fotografía prácticamente arrán de suelo y obtener macros o tomas con puntos de vista espectaculares:
Las patas del trípode y el conjunto son de muy buen material, que transmite solidez y estabilidad. Otro aspecto interesante es que las patas se pueden abrir más de lo habitual si retiras el limitador. Esto es una pieza presente en cada una de las patas que bloquea su movimiento a partir de cierto ángulo y se manipula estirando para liberar el bloqueo o apretando para activarlo:
Extendido al máximo el trípode adopta el siguiente aspecto. Conviene recordar que esto sólo es viable si tienes una columna central corta MTC ya que de lo contrario, deberías aflojar la palomilla centrar para que se desplace la columna hacia arriba y evitar que choque con el suelo y moleste y esto, no tendría sentido ya que recuperarías altura:
Por otra parte, el trípode incluye un práctico nivel de burbuja que te ayudará a encontrar la horizontalidad en tus tomas paisajísticas y panorámicas:
A parte de la funda con las herramientas necesarias para el mantenimiento del trípode, te incluyen una práctica bolsa de transporte de bastante buena calidad, muy resistente y también una práctica correa de transporte con un gancho en un extremo para asegurarla al trípode. El otro extremo se hace un nudo corredero que se cierra fácilmente estirando de la correa.
El trípode es sólido, robusto y muy estable. También es pesado Si estás pensando en instalar un buen objetivo encima de peso considerable puedes hacerlo sin preocupaciones y con confianza. Los especificaciones técnicas del trípode serían:
- Fabricado en aluminio
- 28 mm de diámetro de las patas (sección más gruesa)
- 4 secciones en cada pata
- Plegado hace 55 cm de longitud
- La altura mínima del suelo extendido al máximo son 23 cm
- La altura máxima sin extender la columna central es de 141 cm
- La altura máxima extendiendo la columna central al máximo es de 164 cm
- 2.04 kg de peso sin carga (sin cabezal ni equipo fotográfico encima)
- Soporta hasta 8 kg de carga
El cabezal que adquirí para este trípode fue el MH 5001, también de Giottos. Es tipo 3D y bastante cómodo. Pesa entorno a los 800 gr.
Los mangos del cabezal se puedes desmontar en cualquier momento y enroscarlo uno dentro del otro, con la finalidad de poder plegar al máximo el trípode e introducirlo con facilidad en su bolsa de transporte:
En conclusión, se trata de un excelente trípode, robusto, polivalente pero que a pesar de ser de aluminio, esos 2.04 quilitos se acaban notando a lo largo del día. En la actualidad recomendaría el equivalete de fibra de carbono que pesa 1.53 kg con un cabezal ligero y simple como los de bola. A pesar de ello, es un trípode que me ha dejado hasta la fecha completamente satisfecho en cuanto a resultados fotográficos y además, tiene una excelente relación calidad-precio.